de cadencias y otras cosas

El farol de la calle zumba, de cierta manera sustituye a los grillos que mi imaginación dicta.
Quisiera acordarme de eso tuyo que olvidé, más que nada me gustaría tenerte en frente y volver a comer gestos y rincones y palabras tuyas... comerlos como arrocitos con popote, de uno en uno, ¡zup! ¡adentro! nunca un bocado grande, siempre queriendo más...
Todavía no sé si prefiero descubrir detalles nuevos o reencontrarme con alguno ya observado, como pájaros con anillitos en las patas, marcando migraciones, recordando ciclos y mareas.

La manzana cruje, jugosa, mientras mastico el sonido del mundo es sustituído por el de mis dientes y la fruta, entre mordida y mordida creo escuchar, a lo lejos, una musiquita como de cajita de música, esas de las abuelas, me detengo a media manzana y aguzo el oído... nada, me lo habré imaginado... mejor sigo antes que se ponga toda café y tristona, ¡crac! la nueva mordida, otra vez la musiquita esa, suena conocida pero no la identifico, ni siquiera la podría tatarear (menos mal, soy pésimo haciéndolo) no hay caso si dejo de comer, deja de sonar... comienzo a sospechar que además de rica, esta manzana traía cancioncita, se le habrá pegado en el camino, a mi se me quedan las del camión...
Antes que pueda seguir divagando he dado la última mordida... no sé si quiero comer otra, sería una desilusión que fuera de las calladas, aunque nunca muere la esperanza de que la siguiente vez, me toque una cumbianchera...


Gotas de tinta en un papel poroso, todas redondas y brillantes antes de caer, luego una carrera sobre la hoja, buscando caminos, a ver quién llega más lejos antes de cansarse, al final, queda la mancha toda despeinada y con ganas de ser más grande. Al lado un dibujo, agua, tinta y papel, foto borrosa de algo que no podemos decir ni escribir, la carrera de la gota se detiene antes de descubrirlo, espero que sequen, con cuidado enrollo el papel y lo meto a una botella, salgo, con la idea o esperanza de encontrar dónde arrojarla.

(CUATRO)
Las manchas de Roschach, poco a poco se vuelven letras y palabras y oraciones que escriben sobre manzanas y música y manchas y recuerdos de ella... Tres o cuatro minutos en una hora, en un día, en una semana... Tres o cuatro que valen la pena como para recordarlos, como para compartirlos, como para escribir de ellos... Tres o cuatro en el piso de tu cuarto, buscando chunches divertidas en tu librero, escuchándote tararear una canción, como tu manzana... pero tengo que seguir viendo, porque al detenerme, acaba la música y sigue la conversación... y pronto, nos vamos.
Te quiero... ósculos con guiño travieso, la tercera e.

¿Qué tipo de manzana era? Porque hay muchas variedades de manzana, difieren en apariencia, características de la pulpa, y disponibilidad en las diferentes temporadas.
¿Era una Red Delicious, McIntosh, Granny Smith, Empire o Golden Delicious? ¿O era un poco más amarga o ligeramente ácida como Gravenstein, Grimes Golden, Jonathan, Newtown? ¿Era más firme en su pulpa, Rome Beauty, Northern Spy, Rhode Island Greening, Winesap, York Imperial?
¿O quizá era de Chihuahua o de Puebla? De Puebla son muy ricas.
¿Maduró en el árbol o esperó en un frutero triste y banal? Las manzanas no maduras no tienen buen color o sabor
Rechaza las manzanas demasiado maduras (que ceden a la menor presión aplicada sobre la piel, y que tienen la pulpa blanda y granulosa), así como las manzanas que han sido afectadas por la congelación (que es evidente por las grietas y abolladuras en la piel). Las manchas marrones y de forma irregular en la piel de la manzana no afectan seriamente el sabor. Siempre disfruta la manzana.